El presidente del Grup d'Estudis de la Naturalesa (GEN-GOB), Joan Carles Parlerm, reclamó ayer una inmediata solución a los colapsos y al caos circulatorio en las inmediaciones de Cala d´LHort, donde decenas de vehículos y personas continúan acudiendo a ver la puesta de sol.
Palerm lamentó que la zona se ha convertido en un «punto negro» donde, año tras año, se registran alteraciones del terreno y se produce un elevado riesgo de incendio, además de otras problemáticas asociadas a la realidad que sigue sufriendo este lugar.
Desde el grupo ecologista consideraron que lo que sucede en Cala d'Hort es un ejemplo de la realidad existente en el resto de la isla, evidenciándose «una grave falta de regulación y control» y siendo un ejemplo de lo que pasa cuando no se adoptan medidas.
En este sentido, Palerm se refirió a lugares como Benirràs o Cala Salada , donde en su día se actuó «con un poco más de intención». «Lo cierto es que la mayoría de espacios en la isla no se regulan y es un problema», concluyó.
Desde el Ayuntamiento de Sant Josep reiteraron ayer que se encuentran trabajando en este tema.
Hazel Morgan, de Amics de la Terra, lamentó que, a pesar de las buenas intenciones mostradas por el Consistorio, «al final se ve claro que no es una prioridad y que no les importa nada la biodiversidad de esta zona».
Una vez más, Morgan criticó que el Govern tiene las competencias para comenzar a aplicar el Plan de Gestión Natura 2000 Costa Oeste de Ibiza aprobado desde 2022 «y todavía no ha hecho nada».
Lo cierto es que Amics de la Tierra ha remitido al Ejecutivo balear hasta tres escritos reclamando la aplicación del plan «y nos sentimos frustrados por la falta de respuestas y la ausencia de signos de preocupación en este asunto». Morgan exigió que de la web del Govern se elimine la promoción que pueda hacerse de este espacio y recordó que Amics de la Terra ha denunciado ante Europa la falta de gestión de las instituciones en esta zona protegida.
Según publicó este lunes Periódico de Ibiza y Formentera, a las puertas de la temporada turística y coincidiendo con las vacaciones de Semana Santa, decenas de vehículos volvieron a colapsar el lugar para disfrutar de la puesta de sol desde el mirador de Es Vedrà.
El pasado mes de febrero, los propietarios de los terrenos bloquearon con grandes piedras accesos y caminos en un intento por frenar el turismo excesivo y evitar la presión que se vive cada año en este enclave emblemático de Ibiza. El cierre se llevó a cabo en los dos caminos que conducen a s’Era des Mataret y también al aparcamiento que había en este mirador, así como en el acceso al segundo parking habilitado hace pocos años situado más cerca de la playa.
Cabe recordar que desde la propiedad llevan años reclamando al Consistorio medidas efectivas. El Ayuntamiento autorizó el cierre del acceso y anunció nuevas medidas para evitar el colapso de la carretera, informando sobre el refuerzo de la vigilancia mediante patrullas policiales y un sistema de cámaras que registrará automáticamente las matrículas de los vehículos mal estacionados con multas que alcanzarán los 3.000 euros. No obstante, se prevé que esta medida no se pondrá en marcha hasta el verano próximo.
tikkisEl tema aquí es que Ibiza se ha promocionado durante décadas con la foto de Es Vedrá. A algún punto intermedio tendrán que llegar nuestras maravillosas autoridades para dar solución al problema.