La Federación Empresarial Balear de Transporte (FEBT), y a través de los datos trasladados por numerosos asociados, afirman que algunas navieras han aplicado, en lo que va de año, incrementos tarifarios que se sitúan entre el 50% y el 115%, con especial incidencia en rutas clave como la de Valencia-Ibiza, donde se estima una subida media en torno al 80%. «Esta evolución, de carácter claramente inflacionista, repercute directamente en el conjunto de la cadena logística y, en última instancia, en el ciudadano, quien percibe un encarecimiento del producto, cuando en realidad lo que ha aumentado es el coste del transporte, no el valor del bien en sí», aseveran desde la FEBT.
Asimismo, indican que al sobrecoste se suman los problemas operativos detectados en puertos como Valencia y Barcelona, donde se siguen produciendo esperas y retrasos en el embarque de mercancías. «Esta situación dificulta la planificación de las empresas transportistas y provoca demoras en la llegada de productos a Baleares, afectando al comercio local, al consumidor final y a la competitividad de las empresas de Baleares», destacan.
Asimismo, el sector se encuentra preocupado por la creciente concentración de la operativa y la aparente falta de ampliación de flota por parte de algunas navieras, «en un contexto de demanda creciente». La práctica de compartir carga entre compañías, en función de la disponibilidad de bodega sin incrementar capacidades, indican que está provocando demoras recurrentes y acumulación de vehículos a la espera de embarque, «lo que dificulta gravemente la planificación logística y la continuidad del servicio para los operadores de transporte».
Desde la FEBT hacen un llamamiento, tanto a dichas navieras como al propio Govern de les Illes Balears, para que se vigilen de cerca estas prácticas y se reoriente la política operativa hacia una mayor transparencia, equilibrio competitivo y mejora del servicio. «No podemos olvidar que Baleares depende por completo de su conectividad marítima para el abastecimiento de productos y suministros, y que unas malas prácticas comerciales por parte de quienes ostentan una posición dominante en el transporte marítimo pueden tener efectos devastadores sobre la economía insular», remarcan en un comunicado.
«La FEBT reitera su disposición a colaborar con las autoridades competentes en el análisis de esta situación y en la búsqueda de soluciones que garanticen un transporte marítimo justo, eficaz y sostenible para todos los operadores y para el conjunto de la ciudadanía», concluyen.
Nick741º Los barcos no están viniendo llenos (he hecho esta sSemana Santa- Pascuas 4 veces el trayecto Valencia-Eivissa y vuelta). 2º Los muelles destinados a camiones y trailers no son los mismos que los de los coches. Ni en longitud ni en altura. 3º Si solo pueden llenar los muelles de trailers y camiones, pero dejan los destinados a coches vacios, las perdidas son brutales, pues el número de coches que entran es muy superior al de pesados. 4º El transporte pesado de materiales no cotiza como cotizan en nº de coches (solo hay que tener un dato en cuenta, un trailer es el equivalente en longitud a 5 coches). Las navieras sacan más beneficio por los coches que por los pesados, porque además suelen contratarse en "ida y vuelta". 5º Si fuese el caso contrario, que el negocio de los pesados fuese "rentable" ¿porque no hay una línea o varias líneas fluidas y dinámicas de Roll-Ons con 3 y 4 viajes diarios a la Peninsula? Lo dicho, como las navieras vean disminuir su caja, veremos el kg de arroz a 10 €.