El multimillonario y expropietario del Chelsea Román Abramóvich vuelve a estar bajo el foco mediático tras conocerse que su megayate ‘Eclipse’, asiduo a Ibiza, ha estado tres años atracado en un puerto turco con los generadores en funcionamiento constantemente.
Según ha recogido el Huffpost, la embarcación de lujo ha estado todo este tiempo consumiendo diésel para mantener activado el sistema de aire acondicionado y así proteger los interiores del yate de la humedad del puerto de Muğla.
Este super yate de 162,5 metros, uno de los más grandes del mundo y valorado en 700 millones de dólares, cuenta con varias piscinas, una sala de cine, discoteca y lujosas suites totalmente equipadas. Además, cuenta con un sistema de defensa contra misiles, dos helipuertos, un minisubmarino y ventanas a pruebas de balas.
Ya se sabe, los Maga no creen en el cambio climatico y lo de poner placas solares va contra su religion. Pues a quien puede permitirse esos barcos se les puede exigir que no contamine fuera de su casa