En un operativo conjunto llevado a cabo este viernes entre el Consell Insular de Ibiza, con el servicio de inspección turística, y el Ayuntamiento de Sant Joan de Labritja, con miembros de su Policía Local y del departamento de Urbanismo, se ha procedido al precinto de las instalaciones de un establecimiento que ofrecía alojamientos turísticos de manera ilegal en Benirràs. Según han explicado desde el máxima institución insular, se trata del primer precinto de una actividad ilegal turística que se hace en el marco del Plan de Choque de Lucha contra el Intrusismo, que se puso en marcha a mediados de este año en Ibiza y en el conjunto de las Baleares desde que se modificó la ley al inicio de la legislatura.
De esta manera, se ha precintado una vivienda ubicada en Benirràs, en el término municipal de Sant Joan de Labritja, que ha sido objeto de varias inspecciones en los últimos meses, tanto por parte de los servicios municipales, como por parte de los del Consell, que constataron diversas infracciones: por un lado, la oferta de alojamiento turístico sin licencia, y por otro lado, la oferta como centro de yoga sin licencia, además de haber construido una serie de casitas de madera también fuera de la ley, levantadas en suelo rústico protegido sin licencia.
Por parte de los servicios de inspección turísticos del Consell, se decretó la suspensión de actividad como alojamiento, así como una propuesta de sanción de casi 250.000 euros por ofertarla sin licencia.
El Ayuntamiento de Sant Joan, por su parte, inició un expediente sancionador por infracción muy grave en materia de actividades contra los responsables de las instalaciones que operaban como centro de yoga sin licencia, con una propuesta de sanción de 165.000 euros, además de la prohibición total de continuar con la actividad. El Consistorio también dictó una orden de demolición de las casitas de madera construidas de forma ilegal, orden que la propiedad no ha ejecutado aún.
En el operativo llevado a cabo este viernes, se ha constatado que todavía se mantienen los elementos propios de un alojamiento, «como son la cartelería y recepción, se han identificado a varias personas que decían ser clientes y se ha certificado que en las casitas había personas viviendo», han detallado desde el Consell de Ibiza.
Por todo ello, se ha procedido al precinto de estas instalaciones y se continuará con los procedimientos sancionadores abiertos por parte del Ayuntamiento y del Consell.
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