Los diferentes ayuntamientos de Ibiza están intensificando el control contra las fiestas ilegales en villas y la mayoría de consistorios ha interpuesto este año importantes sanciones por esta actividad.
En relación a Sant Josep, en 2025 se han registrado 53 denuncias dirigidas a viviendas por molestias y por la realización de actividades sin título habilitante. En estos casos, los eventos no se catalogaron como fiestas ilegales ya que no se pudo acreditar el cobro de entrada. Sin embargo, se han registrado dos denuncias específicamente tipificadas como fiestas ilegales.
En Sant Joan, por el momento, no se han registrado este año denuncias por la celebración de fiestas ilegales en villas, aunque el Ayuntamiento abrió en 2022 dos expedientes por este motivo; otros dos en 2023 y uno el pasado año por esta misma causa.
El Consistorio de Santa Eulària ha abierto este 2025 tres expedientes relacionados con fiestas ilegales que se celebraban en casas o fincas dentro del término municipal. Actualmente, se encuentran en fase de instrucción y, por lo tanto, de momento no cuentan con una resolución.
El Ayuntamiento recordó que las sanciones por la celebración de una fiesta ilegal en una villa pueden oscilar entre los 30.000 y los 300.000 euros.
Cabe recordar que a finales de julio la Policía Local de Santa Eulària interpuso una denuncia contra la propiedad de una villa construida en una finca ubicada en el entorno de Cala Olivera por la celebración de una fiesta ilegal que, según las investigaciones, incumplía varias normativas vigentes.
A primera hora de la mañana, los agentes realizaron un seguimiento a vehículos particulares y de transporte privado de viajeros después de recibir el aviso de lo que podía ser un punto de encuentro en Jesús para los clientes de una fiesta ilegal. Finalmente, la celebración presuntamente se estaba desarrollando en el sótano de la vivienda, un espacio que había sido construido para evitar que la música trascienda al exterior y evitar levantar sospechas entre el vecindario.
Los agentes pudieron constatar que había personal de seguridad y la presencia de personas saliendo de esta propiedad privada. Los asistentes -unos 100- reconocieron haber recibido una pulsera identificativa tras el pago de 130 euros que daba derecho al acceso a la fiesta y a dos consumiciones.
Desde AVAT (Asociación de Viviendas Turísticas de Ibiza y Formentera) puntualizaron ayer que no siempre las villas donde se celebran estos eventos ilegales son viviendas turísticas. En cualquier caso, señalaron que si se estaba celebrando una actividad con ánimo de lucro sin los correspondientes permisos, los responsables deben ser sancionados tal como indica la normativa.
Pedro TDice Ud. muy bien, tiene toda la razón, y lugares que no son villitas como por ejemplo apartamentos de recién construcción en SAN ANTONIO DE PORTMANY, sí esos que ya los construyen con terracita en la azotea del edificio y que alquilan a turistas que están toda la noche con el Chunda, chunda, Ah! Qué el ayuntamiento de Sant Antoni mira para otro lado, SÍ !!!