El gerente de Abaqua, Emeterio Moles, explicó este martes que la desaladora de Santa Eulària ya vuelve a estar conectada con el anillo hidráulico de Ibiza, que conecta las tres potabilizadoras de la isla, después de que la última riada afectara a esta instalación. «La fuerza del agua socavó bajo la tubería y arrancó unos 25 metros de tubería. Ha habido que hacer un camino provisional de acceso, pero la reparación en sí terminó el sábado. Luego se hicieron los anclajes de hormigón y se ha repuesto el el servicio. Ahora mismo nuestras tres plantas están funcionando con total normalidad y suministrando toda el agua a los municipios», apuntó este miércoles Moles.
El gerente de Abaqua destacó que el servicio de suministro de agua no se ha interrumpido durante este tiempo sino que se ha aprovechado el agua que había de reserva en los depósitos. «Ahora mismo incluso tenemos un excedente que nos permite recuperar nuestros depósitos en previsión de otro posible incidente», añadió el máximo responsable de Abaqua.
Moles, cuestionado por la capacidad de las infraestructuras de la isla para asumir precipitaciones como las de las últimas tres semanas, explicó que el primer día, el 30 de septiembre, en prácticamente cuatro horas en la ciudad de Ibiza cayeron 300 l/m2, la mitad de lo que suele llover en un año. «No hay infraestructuras que estén preparadas, diseñadas y capacitadas para esto. Lo que sí podemos hacer es mejorar toda esa capacidad de drenaje, lo que está haciendo el Ayuntamiento, ymejorar aquellos puntos donde el agua se quedaba retenida y luego nosotros aprender de estas situaciones y hacer cosas como las que vamos a hacer, que es ubicar en otros puntos distintos que no puedan estar sometidos a la inundación los elementos eléctricos más más relevantes y más importantes», apuntó Moles.