El Govern ha constituido la Comisión para la Gestión Integrada del Riesgo de Inundación de Baleares (Inuncaib), que será un nuevo órgano colegiado que tiene como objetivo «mejorar la coordinación, la planificación y la respuesta institucional» ante las inundaciones.
Las inundaciones representan una amenaza recurrente para la seguridad de la población, el medio ambiente y la economía del archipiélago, según advirtieron desde la Conselleria balear de Presidencia, Coordinación de la Acción de Gobierno y Cooperación Local en un comunicado.
Ante esta realidad, el Govern impulsa un modelo de gestión integral del riesgo que permite «prevenir, mitigar y responder de manera eficiente y coordinada a estos episodios», al aprovechar «todos los recursos disponibles y promover la colaboración entre los diferentes actores públicos y privados implicados».
El director general de Emergencias y Interior, Pablo Gárriz, expresó que esta gestión integrada supone «aprovechar todos los recursos que tiene el Govern». «El Govern establecerá líneas de trabajo estratégicas fundamentales para la gestión integrada del riesgo de inundación. Este jueves se ha celebrado la primera reunión y se ha puesto en marcha los grupos de trabajo para identificar las acciones de gobierno que se deben implementar tanto en materia de modelización del territorio, sensorización, identificación de aplicaciones y herramientas informáticas que permitan agilizar la comunicación del riesgo y desarrollar una cultura de autoprotección ante el riesgo de inundación», según destacó.
La nueva comisión se adscribe a la Conselleria de Presidencia, Coordinación de la Acción de Govern y Cooperación Local, y actúa como órgano de consulta, asesoramiento y coordinación transversal en materia de gestión del riesgo de inundación. Forman parte de ella representantes de las principales direcciones generales y entidades públicas autonómicas con competencias relacionadas con emergencias, recursos hídricos, innovación y tecnología.
Entre sus funciones principales, la comisión impulsa y coordina las actuaciones necesarias para una gestión «correcta e integrada» del riesgo de inundación, asesora en la planificación y ejecución de políticas en materia de protección civil, hidrología e innovación tecnológica aplicada al seguimiento y la predicción de inundaciones y promueve la gestión compartida de la información meteorológica y cartográfica, además de la sensorización del territorio para «mejorar la detección temprana y la capacidad de respuesta». Igualmente, pretende fomentar la cultura de la autoprotección y la cooperación institucional en la gestión del riesgo, con el objetivo de «consolidar una estrategia común ante los fenómenos meteorológicos adversos».
Esta comisión se reunirá con carácter ordinario al menos dos veces al año y puede convocar sesiones extraordinarias cuando sea necesario. Su funcionamiento no supone ningún incremento de gasto para la administración autonómica «Con la creación de Inuncaib, el Govern da un paso adelante en la consolidación de un sistema integrado y científicamente fundamentado de gestión del riesgo de inundaciones, que refuerza la coordinación entre instituciones y mejora la capacidad de previsión y respuesta ante fenómenos meteorológicos extremos», según destacaron desde el Govern.
Ibiza
En el caso de Ibiza, Jordi Grivé, cuarto teniente de alcalde y concejal de Gestión Ambiental y Limpieza de Vila, asistió a la primera reunión de esta comisión especializada.
«La participación del Ayuntamiento de Ibiza en este órgano es clave para reforzar la coordinación entre administraciones y garantizar una respuesta más eficiente ante posibles episodios de inundaciones, especialmente en un contexto de cambios climáticos que aumentan la frecuencia e intensidad de los temporales», expresó Grivé, quien recordó que Vila ya ha iniciado e intensificado incidencias durante los temporales.
Según recordaron desde el Consistorio, las actuaciones, desarrolladas con el apoyo de la empresa concesionaria Aqualia, se han centrado en la limpieza y revisión de la red de aguas pluviales, especialmente en aquellos puntos que históricamente han presentado mayores complicaciones. Entre las intervenciones más destacadas se encuentra la limpieza del tubo principal en el camino Can Murtera, a la altura de la calle Pere Francés, que recoge el agua procedente de la carretera EI-10, mejorando la capacidad de evacuación y reduciendo el riesgo de atascos. También se han llevado a cabo trabajos de retirada de fangos y sedimentos en los canales de ses Feixes, entre la EI-10 y la avenida de Santa Eulària, con el objetivo de mejorar el flujo de agua y prevenir desbordamientos durante episodios de lluvias intensas.
Por último, Grivé recalcó que «la prevención y el mantenimiento continuo son la mejor manera de proteger las calles, los hogares y los negocios de la ciudad y que la colaboración entre instituciones y la gestión anticipada del riesgo son esenciales para garantizar la seguridad de la ciudadanía».
Todos estos cobran cada mes y la ciudad se inunda cada vez que llueve.