El concejal de Barrios Históricos de Ibiza, Juan Flores, ha mostrado este miércoles su confianza en que las obras de reforma del Mercat Vell estén listas durante la próxima primavera. Los paradistas, que desde el 1 de septiembre trabajan en la calle Comte Roselló, se mostraron días atrás pesimistas, en declaraciones a Periódico de Ibiza y Formentera , sobre los plazos que maneja que el Consistorio. Sin embargo, Flores cree que podrán volver a su histórica ubicación «a mediados o finales de marzo».
El edil ha explicado que las obras comenzaron el 1 de septiembre y tuvieron que ser paralizadas el 2 de octubre debido al hallazgo de diferentes restos arqueológicos. Una vez realizado el informe preceptivo, se autorizó reiniciar los trabajos el 20 de octubre. Sin embargo, debido a las inundaciones sucedidas las semanas anteriores, el nivel freático de la zona había «crecido mucho», lo que obligó a volver a paralizarlas.
«El retraso será de un mes o mes y medio»
Además, ha sido necesario «replantear la cimentación» tras comprobar lo elevado de este nivel. «Ahora se ha decidido hacer una losa de hormigón para la estructura del mercado», ha explicado Juan Flores, «al tener que replantear el proyecto, se ha producido otro retraso. Yo espero que todo esté a mediados o finales de marzo, aunque hay que ver cómo van los trabajos. El retraso será de un mes o mes y medio».
El concejal de Mercados, Álex Minchiotti, ha señalado, por su parte, que mantiene contacto permanente con los comerciantes afectados por estas obras. Minchiotti ha asegurado que «tienen que estar muy tranquilos» porque el Ayuntamiento es «el primer interesado en que vuelvan cuanto antes» a su antigua ubicación. Minchiotti, además, ha criticado al PSOE de Vila por aprovechar el parón sufrido por las obras para arremeter contra el Consistorio: «Sus declaraciones son mentiras. No están a la altura de las circunstancias. Me acusan de falta de transparencia y es mentira. Se ha informado a los paradistas de que pueden seguir donde están hasta que acaben los trabajos. Hemos encontrado el encaje legal para que puedan estar ahí mientras se hace la tramitación para que vuelvan al Mercat Vell».
Álex Minchiotti ha negado que los paradistas tengan problemas de suministro eléctrico y de agua en estos momentos. El edil ha admitido que sí sucedió los primeros días del traslado pero porque «no se podía hacer la conexión hasta que no estuvieran allí y dijeran lo que les faltaba». Minchiotti considera que la nueva ubicación, aun siendo temporal, «ha sido un gran éxito y está funcionando muy bien».
Tanto es así que, según ha explicado, los propios vecinos de La Marina han solicitado que se dé alguna utilidad a este espacio una vez que los paradistas retornen al Mercat Vell. «Ha gustado muchísimo que diéramos vida a esta plaza», ha afirmado, «nos dicen que una se había hecho. Los paradistas están trabajando muy bien. Nuestro objetivo era que no se vieran afectados por las obras y que el traslado los dejara igual o mejor. Y creo que eso se ha conseguido».
«La punta de lanza de la innovación»
«Entiendo que el PSOE haga oposición», ha dicho también el concejal, «pero esto no me parece correcto. Se han puesto las paradas que los paradistas han necesitado, tienen almacén y nevera y no ha afectado a ninguna terraza». Minchiotti ha admitido que las obras se están demorando pero también ha indicado que este retraso «no es importante».
El responsable municipal de Mercados, finalmente, ha asegurado que la reforma del Mercat Vell será «la punta de lanza de la innovación» urbana que está llevando a cabo el Consistorio en estos momentos. Y ha añadido que este espacio será «una plaza que mira al futuro». Sobre cómo han afectado los trabajos a los comercios y cafeterías del entorno, el edil ha asegurado que «ha sido inevitable» pero también ha recordado que «ya no hay ni escombros ni material de obra» y ha subrayado que este tipo de decisiones son técnicas y no políticas.
Eso lo quiero ver. No puede ser un equipo de gobierno más nefasto. Están haciendo bueno a Rafa Ruiz. No solo está sa Peixeteria por acabar, sinó ahora esto. De mal en peor y sin acometer pequeñas obras de mantenimiento para el buen estado de la ciudad.