Un martes más, la consellera balear de Salud, Manuela García, ha tenido que hacer frente a los ataques de la socialista Irantzu Fernández en el Parlament a cuenta del estado del Área de Salud de Ibiza y Formentera. García ha defendido la gestión de este área, dirigida por el doctor Enrique Garcerán, y ha asegurado que su equipo trabaja «mañana, tarde y noche» para dejar en las Pitiusas una mejor sanidad pública de la que dejaron los gobiernos de la socialista Francina Armengol.
García ha puesto sobre la mesa los avances experimentados por el Área de Salud de Ibiza y Formentera bajo la gestión del PP como respuesta a Fernández. Así, ha explicado que en estos momentos hay servicios en los que se ha superado la plantilla de profesionales inicialmente prevista. «No habla de la constante e imparable contratación de profesionales en el hospital de Can Misses», ha reprochado a la diputada del PSOE. Y ha recordado que ahora se han recuperado algunos servicios.
«Hemos creado las condiciones para que la captación y fidelización de los profesionales sea estructurada y permanente», ha añadido, «con ustedes, la fuga de profesionales era constante y estructurada».
Manuela García ha recordado que el Govern de Armengol gastó «3,7 millones de euros en la compra de mascarillas», como prueba de una gestión ineficiente: «Usted y yo no tendremos nunca la misma percepción de la gestión del dinero público». La consellera, además, ha utilizado un artículo publicado por Periódico de Ibiza y Formentera bajo el título Irantzu, la torticera, para criticar a la diputada ibicenca por haber dado a conocer ante la Cámara autonómica los datos de salud del hombre fallecido la semana pasada en el área de Urgencias de Can Misses, tras caer, al parecer, accidentalmente, desde un muro al aparcamiento. «Su desvergüenza no tiene límites», ha reprochado García a Fernández, «usar muertos con fines políticos es indecente». Unas palabras a las que Fernández no ha respondido.
Irantzu Fernández, por su parte, ha vuelto a arremeter contra la gestión del Área de Salud basándose en situaciones como la imposibilidad de completar la plantilla del área de Oncología o las deficiencias en la sala del 061. «La gestión del gerente es ineficiente e ineficaz», ha dicho y ha recordado el escrito firmado por una veintena de profesionales del área pidiendo su dimisión.
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