Los Bomberos de Ibiza llevaron a cabo el pasado miércoles un simulacro de accidente de tránsito con incendio de vehículos en el interior del túnel de Sant Rafel, situado en la carretera EI-600 que une Ibiza con Sant Antoni.
Esta actuación se enmarca dentro del plan de formación y actualización de los servicios de emergencias con el firme objetivo de mejorar la respuesta ante incidentes graves en infraestructuras críticas.
El objetivo principal de este simulacro fue evaluar la eficacia de los sistemas de seguridad instalados en el túnel, así como la coordinación y actuación conjunta de todos los servicios de emergencia implicados en un escenario de elevado riesgo como es un incendio con posibles víctimas en un espacio confinado.
El túnel de Sant Rafel constituye uno de los puntos neurálgicos de la red vial que conecta Ibiza con Sant Antoni, una vía frecuentemente transitada por vehículos particulares y de transporte público. Los simulacros en este tipo de infraestructuras son fundamentales para garantizar una rápida y coordinada respuesta ante emergencias que podrían poner en riesgo la seguridad de los usuarios y ocasionar graves daños materiales.
Según informó el equipo de Bomberos de Ibiza a través de sus redes sociales oficiales, "este tipo de prácticas nos permiten entrenar estrategias de ventilación, acceso en espacios confinados, atención a posibles víctimas y control del fuego en un entorno de visibilidad limitada". Estos entrenamientos incluyen maniobras específicas para mejorar la gestión del humo, la evacuación de heridos y la extinción rápida del incendio.
En este tipo de prácticas se prueba la comunicación entre los distintos servicios de emergencia, facilitando la coordinación logística y el despliegue eficaz de recursos como ambulancias, unidades de mando y señalización vial para controlar el tráfico durante la emergencia. La colaboración entre cuerpos policiales y los bomberos es esencial para garantizar un perímetro seguro y facilitar la llegada de los equipos sanitarios al lugar.