El abogado de la familia de Thomas Egner, el alemán desaparecido en Eivissa en 1998 y en cuya casa fue detenido Juan Torres Serra el «Pirata», ha pedido al juzgado que dirige la investigación que se interese sobre un cadáver descuartizado que fue hallado la semana pasada en la localidad alicantina de Altea y que aún no ha sido identificado.
No hay ninguna pista que relaciones directamente el cadáver con la desaparición de Egner, pero la acusación particular del «caso Pirata» ha considerado conveniente hacer notar el hallazgo en el juzgado por si de ello se extrae un resultado sorprendente para la investigación.
Esta gestión se ha realizado después de que la subdelegación del Gobierno en Alicante haya informado de que la autopsia que se le practicó al cuerpo, al que faltaban las dos manos y la cabeza, revelara que el cadáver estuvo congelado. Asimismo, no está descartado que el crimen se hubiera perpetrado en otra provincia e incluso en otro país. La altura de dicha persona, además, era la misma que tenía Thomas Egner.