El cadáver torturado de un niño de tres años fue encontrado ayer cerca a la ciudad de Tunja, y las autoridades investigan si fue víctima de un secta satánica.
El coronel Pedro Ramírez, comandante de la Policía en el departamento de Boyacá, del que es capital Tunja, indicó a la emisora «Radionet» que el cuerpo presentaba un corte en el cuello, además de otros signos de maltrato, por lo que se estudia si el asesinato tiene que ver con algún rito satánico.
El niño, que no fue identificado, fue secuestrado el viernes en el centro de Tunja, situada a 150 kilómetros al norte de Bogotá. El padre del pequeño relató a la cadena de radio que un hombre de pelo largo y que vestía una chaqueta de color negro se llevó en un momento de distracción, a su hijo, en cuya compañía pedía limosna en la Plaza de Bolívar de Tunja.
El coronel Ramírez pidió a los padres que extremen la vigilancia sobre sus hijos, pues dijo que en estos días se celebran en Colombia los 40 años de llegada a América Latina de las sectas satánicas. Los llamados de alerta de la Policía se han intensificado en todo el país con ocasión de la Semana Santa, que por ser una celebración católica incita a que los adoradores de Satán realicen sus propias ceremonias, según los estudiosos del tema en Colombia.