Enrique S.M., el funcionario de Correos que durante 1997 y 1997 fue jefe accidental de la oficina de Sant Francesc y al que se le imputaba un presunto delito de malversación, ha sido absuelto de los cargos que se le imputaban.
Esta fue la decisión que tomó el jurado que se reunió la semana pasada en Palma para decidir sobre su causa en la Audiencia Provincial. Los miembros del jurado apoyaron que no se podía imputar a Enrique S.M. la acusación de malversación que pesaba sobre él por desaparecer más de un millón de pesetas de la oficina por distintos conceptos. El propio acusado relató al jurado que tras descubrirse por una auditoría la falta del dinero él mismo se responsabilizó de lo ocurrido y estuvo dispuesto inmediatamente a reponer el dinero. Lo atribuyó todo a un error en la gestión. La decisión del jurado se tomó después de que la fiscalía retirara la acusación en unos cargos que sólo mantuvo el abogado del Estado y en los que se pedían tres años de prisión.