La Policía tuvo que intervenir en el distrito madrileño de Vallecas para evitar que unos 300 vecinos lincharan el pasado viernes a un agente al que creían autor del asesinato de su compañera sentimental, quien se había suicidado, informaron fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
La víctima, de 30 años, fue hallada por el agente hacia las 17'00 horas del viernes en el dormitorio de su domicilio, en la calle Ramón Pérez de Ayala, con una herida de arma de fuego en la cabeza. El arma encontrada en el lugar, una pistola, fue trasladada a dependencias de Policía Científica para ser analizada, según las mismas fuentes.
Tras el suceso, los vecinos de la zona fueron llegando a las inmediaciones del domicilio de la víctima visiblemente alterados por el suceso, al creer que el agente era el autor de la muerte de la joven, y comenzaron a proferir gritos de rechazo como «policía asesina». El tumulto llegó a congregar a más de 300 personas. Para evitar una posible agresión al agente, la Policía envió al lugar varios coches patrulla para disolver la improvisada manifestación. Los vecinos, enardecidos, llegaron a lanzar piedras contra los vehículos policiales.