El secuestrador de la guardería de Wasserbillig, que mantuvo en vilo a Luxemburgo durante más de 24 horas, se encuentra ya fuera de peligro, tras haber sido operado en el Cento Hospitalario de la capital de las graves heridas sufridas durante el asalto policial, según informó ayer la agencia local Luxemburger Wort.
El perturbado, un tunecino de 39 años de edad identificado como Neji Bejaui, recibió en la tarde del pasado jueves dos impactos de bala en la cabeza durante el asalto de las fuerzas del orden luxemburguesas a la guardería, donde mantenía secuestrados desde el día anterior a 25 niños y tres adultos. Según el hospital, el secuestrador se encuentra fuera de peligro. Las primeras informaciones sobre la operación policial señalaban que el individuo, armado con varias granadas de mano, una pistola, un cuchillo y un bidón de gasolina, había muerto durante el asalto.
Por su parte, la policía luxemburguesa reconoció que la policía alemana puso material a su disposición, aunque negó que una unidad especial de aquel país participara en la operación.