Muchos de los turistas e ibicencos que han acudido a lo largo de esta última semana a la playa de ses Salines, en Sant Josep, han sufrido pequeños hurtos de sus pertenencias. Al parecer, en la zona opera una banda organizada de ladrones de origen norteafricano, según varios testigos.
La Policía Local de Sant Josep dijo ayer tener constancia de las actividades delictivas de este grupo que, según explicaron a este periódico, actúan días alternos para despistar a los cuerpos de seguridad que vigilan la zona. La Guardia Civil tiene conocimiento de esta oleada de hurtos y, según parece, ya está investigando.
Los delincuentes aprovechan cualquier momento de descuido de la gente que acude a la playa para acercarse a los bolsos y mochilas y sustraer todos los objetos de valor que allí encuentran. Asimismo, los ladrones esperan el momento en el que la gente va al mar para bañarse para hacerse con el botín. Verano tras verano se producen situaciones muy similares a ésta en la costa de las Pitiüses. Los delincuentes repiten siempre el método para los hurtos.