Los bomberos resolvieron con media docena de salidas la noche de Sant Joan en una guardia que desde el Parque Insular se destacó su «normalidad», vista la ausencia de intervenciones especiales y de incidentes graves durante las horas que se consideran de riesgo por el masivo lanzamiento de petardos y la proliferación de foguerons en casi todos los puntos de la isla.
Las más destacadas se refirieron a pequeños fuegos de rastrojos que se declararon y que pudieron ser rápidamente controlados en servicios que se realizaron paralelamente al dispositivo de control que como todos los años cubrió la zona de Sant Mateu y de Sant Joan, entre otros puntos donde se extremó la vigilancia. Así los bomberos intervinieron nada más cumplirse la medianoche junto a la carretera de Sant Joan y sobre las tres de la madrugada para sofocar otro pequeño fuego forestal que enseguida pudo ser extinguido. Las unidades del Parque Insular también tuvieron que acudir a la carretera de Sant Josep, en las proximidades de Can Bellotera, al recibirse el aviso de un incendio de leña. A su llegada se verificó que la alarma había surgido al iniciar otras personas una hoguera. Los bomberos también tuvieron que intervenir en el caso urbano de Eivissa, en la calle Ignasi Wallis, como consecuencia de un fuego en un montón de papeles.
Todas las policías locales de la isla, por su parte, destacaron la ausencia de incidentes durante la celebración de Sant Joan en sus respectivos términos municipales. Al cierre de esta edición, los bomberos sofocaban en Platja d'en Bossa un incendio de rastrojos, ocurrido poco después de apagar un incendio en un contenedor en Sant Josep.