Dos días después de que un hombre perdiese la vida en Benirrás y apenas unas horas después de otro se ahogara en ses Figueretes, la playa de es Cavallet, sumó otra víctima en aguas ibicencas. El cuerpo del fallecido, sin identificar, fue descubierto sobre las 11.30 horas por unos bañistas que lo encontraron flotando. Estas mismas personas le arrastraron hasta la arena, lugar en el que el cadáver quedó hasta que el forense certificó su fallecimiento, y luego desaparecieron.
Los responsables de un chiringuito cercano dieron el aviso al 112 después de divisar el cuerpo, presuntamente ya sin vida, recostado cerca del mar. El cadáver, debajo de una sombrilla a la vista de todo el mundo y cubierto sólo por una camiseta , no fue levantado hasta dos horas más tarde. Finalmente, sobre las 14.30 horas, se realizó el levantamiento del cadáver ante la expectación del resto de bañistas que contemplaban incrédulos lo ocurrido.
La víctima, de unos 45 años, llevaba unas zapatillas de plástico calzadas lo que levanta la hipótesis de que momentos antes había estado caminado por terreno rocoso. Asimismo no se descubrieron, en la primera inspección, contusiones por lo que, a falta de lo que resuelva la autopsia, no se piensa que haya en esta muerte circunstancias criminales. Las aguas ibicencas se han cobrado ya seis víctimas mortales en este verano. Los últimos tres días han sido especialmente trágicos, con tres fallecidos sin que se hubieran cumplido las 72 horas. A la última víctima hay que sumarle la del hombre que se ahogó anteayer en ses Figueretes, presuntamente debido a un infarto, y la de otro, en la medianoche del lunes, en Benirràs, que intentaba ganar su barco a nado tras sufrir un fallo el motor de la lancha en la que iba.