Un esquizofrénico armado con un cuchillo de cocina entró ayer en un colegio cercano a Osaka y asesinó indiscriminadamente a cuchilladas a ocho escolares de corta edad. Hasta el momento se desconocen los motivos del ataque ocurrido en la Escuela Primaria de Ikeda, al oeste de Japón, pero la televisión pública NHK informó de que el atacante, identificado por la policía como Mamoru Takuma, declaró a los agentes que había tratado de suicidarse en repetidas ocasiones y al no conseguirlo optó por atacar a los escolares para ser condenado a muerte.
Takuma, de 37 años y bajo los efectos de una sobredosis de tranquilizantes, entró en el colegio durante un descanso y comenzó a apuñalar a los estudiantes con un cuchillo de quince centímetros. Dos de los niños murieron en el acto y los otros seis fallecieron en los hospitales adonde fueron enviados. El atacante hirió además a dieciocho niños y a tres profesores, siete de ellos de pronóstico grave. Tras perpetrar el ataque fue reducido por dos profesores que le entregaron a la policía.