El alcalde de Formentera, Isidor Torres, aseguró ayer tras la Junta Local de Seguridad celebrada en esta isla que se iba actuar con «rigor y firmeza» a la hora de disolver las aglomeraciones nocturnas que causen perjuicios a los vecinos, al tiempo que solicitó la colaboración de los locales nocturnos susceptibles de ocasionen estas molestias.
Torres, junto con la directora insular, Marienna Sánchez-Jáuregui, y responsables policiales de Formentera mantuvieron un encuentro para mejorar la coordinación entre la Guardia Civil y la Policía Local de manera que «cada cuerpo pueda cumplir con sus obligaciones propias y, a la vez, de forma conjunta puedan hacer frente al considerable incremento de trabajo que se produce en verano», según explicó el alcalde.
Los nuevos planes suponen que tanto la Guardia Civil como la Policía Local actuara como se ajustado a ley para disolver las concentraciones nocturnas y para sancionar y precintar aquellos locales que superen los niveles sonoros permitidos.
La preocupación por las aglomeraciones nocturnas se suma a las habidas otros años por las acampadas, accidentes de tráfico e incendios. En este sentido, el peligro de fuegos forestales es mayor a causa del temporal de noviembre, que dejó zonas dañadas sin que se pudiera retirar la maleza.
Sánchez-Jáuregui, por su parte, garantizó que a partir de julio el número de efectivos de Guardia Civil aumentará de 13 a 22 agentes y que, como el año anterior, se contará con presencia esporádica de unidades especiales del instituto armado.