Una mesa de trabajo que reunió ayer a la directora insular, Marienna Sánchez Jáuregui y al alcalde de Sant Antoni, Antoni Marí Tur, con mandos de la Guardia Civil y de la Policía Local acordó la necesidad de definir y coordinar nuevas medidas para paliar la sensación de inseguridad que desde distintos sectores se vuelve a denunciar en esta localidad y su bahía.
La Junta Local de Seguridad ya perfiló semanas atrás un plan que incluía el incremento de las patrullas a pie y la presencia de unidades de paisano para luchar sobre todo contra el tráfico de drogas, los robos y situaciones intimidatorias que pudieran derivarse de la venta ambulante ilegal. El operativo también se inició con una coordinación mayor con el Cuerpo Nacional de Policía, a quien compete todo lo relacionado con extranjería.
Este sistema ha conseguido resultados. Sólo en las últimas horas el puesto de Sant Antoni ha practicado diligencias por una decena de detenidas y la Policía Local de Sant Antoni cursó un total de 60 denuncias recogidas anteayer en la lucha contra la venta ambulante ilegal.
El plan, tras las conclusiones adoptadas ayer, va a recibir nuevas aportaciones con el objeto de enriquecer no sólo su efectividad y sino también para conseguir por partida doble un dispositivo que sea disuasorio y preventivo a la vez que se ofrece al ciudadano y al turista una imagen que le permita sentirse protegido.
La clave, por tanto, es conseguir que las fuerzas policiales se coordinen para incrementar de manera notable su presencia en la calle, un factor sobre el que ahora se va a incidir con mayor profundidad tras la experiencia de las primeras semanas.
El dispositivo cuenta ya con los refuerzos de la Guardia Civil, cuerpo que ha reunido cerca de 80 agentes para el puesto de Sant Antoni especialmente destinados a tareas de uniforme. Estos efectivos, sin embargo, también tendrá que cubrir la zona de Sant Josep y Platja den Bossa. Paralelamente los servicios a pie tendrán la ayuda de unidades motorizadas y el incremento de presencia de coches patrulla. La plantilla de agentes de la Policía Local, una treintena en total en servicio para este verano, se incluye dentro del mismo operativo.