La Policía Local detuvo el pasado lunes a R.M., de nacionalidad francesa y nacido en 1969, acusado de un delito contra la seguridad en el tráfico. R.M. era la persona que se encontraba al volante de un potente deportivo, un Maserati con matrícula francesa 4550WW67, que colisionó violentamente contra un taxi tras perder el control del vehículo cuando se dirigía hacia Eivissa.
Según fuentes de la Policía Local, testigos presenciales indicaron que el descapotable circulaba por la avenida de Sant Josep, en Cases Barates, realizando acelerones. Al parecer perdió el control del mismo tras adelantar a un turismo y encontrar en el carril a un motorista. La maniobra para evitarle provocó que el coche derrapara, girara sobre sí mismo y fuera a parar al carril contrario, donde chocó contra el taxi, que recibió todo el impacto frontalmente. Asimismo, R.M., que ayer pasó a disposición judicial, deberá responder igualmente por un delito de desobediencia grave a los agentes de la autoridad, tras negarse a realizar el preceptivo control de alcoholemia tras el accidente.
Junto a R.M., en el deportivo viajaba una joven, I.B., también de nacionalidad francesa y nacida en 1979, quien salió despedida del vehículo tras el impacto. Por lo que se refiere al taxi, un Peugeot 406 matrícula 8796BJP con el número 67 de la ciudad de Eivissa, en el mismo circulaban su conductor A.L.M., español y nacido en 1967, y los pasajeros que lo ocupaban: M.S.T., nacido en 1970; V.S.Z., nacido en 1957, y F.R.L., nacido en 1954. Los heridos fueron evacuados por Ambulancias Ibiza y UVI móviles del Servicio de Emergencias 061 a la Policlínica Nuestra Señora del Rosario y al hospital de Can Misses. Desde ambos centros hospitalarios se señaló ayer que todos ellos evolucionaban favorablemente de sus lesiones y de que, en ningún caso, se temía por su vida.
Asimismo, resultó herida leve E.L.M., la conductora de un tercer vehículo, un Opel Corsa de color blanco y matrícula PM-2656-BV, que fue alcanzado tras el primer impacto entre el Masseratti y el taxi. La espectacularidad del accidente, que requirió la presencia de los bomberos, Policía Local y Guardia Civil, obligó a cortar la avenida de Sant Josep entre Cas Serres y la rotonda de Figueretes, provocando fuertes retenciones.