La Guardia Civil ya cuenta con la identidad del hombre que apareció muerto el pasado domingo en la playa de es Pouet, en la bahía de Sant Antoni, con signos de haber fallecido ahogado. Se trata de Mark James Cowan, un joven escocés de 20 años de edad y que estaba pasando sus vacaciones en los apartamentos Clipper de Port d'es Torrent, en el término municipal de Sant Josep. Ayer aún no se conocían datos sobre la autopsia que debía serle practicada al cadáver, pero algún medio de comunicación escocés aventuró la posibilidad de que se tratara de una muerte violenta, y no de un accidente.
Mark James Cowan apareció en la playa con el cuerpo hinchado, un signo que apunta a que el motivo del fallecimiento del joven fue el ahogamiento, un hecho que finalmente confirmó ayer mismo la familia del fallecido desde Escocia. De hecho, la cadena británica BBC radio citó fuentes de la Guardia Civil que explicaron que la hipótesis más plausible es que cayera al mar y se golpeara con la rocas debido al mal tiempo. Esta emisora añadió igualmente que las fuentes de la Benemérita preferían no hacer un anuncio oficial de lo sucedido a la espera de los resultados definitivos de la autopsia, aunque prácticamente descartaban por completo un hecho violento.
Al mismo tiempo, en Escocia, el periódico «Daily Record» aventuraba ayer la posibilidad de que la muerte de Cowan no fuera debida a un accidente, sino que que el joven turista fue golpeado y abandonado para que muriera, un extremo negado por la familia. En la información de este rotativo se mencionaba que Cowan fue hallado «sin signos de violencia», según explicó la policía a dicho periódico.
Violencia oculta para favorecer el turismo
El rotativo «Daily Record» afirma en el artículo dedicado a la muerte de Mark James Cowan que «es notoria la actitud de la policía en Eivissa por quitar hierro a la violencia en la isla para proteger el negocio turístico». Mark James Cowan trabajaba en un McDonald's en la localidad escocesa de Ayr y era un gran aficionado al hockey sobre hielo. La información aparecida en dicho periódico recogía los testimonios de los compañeros de viaje de Cowan relatando su desaparición.