AGENCIAS-A CORUÑA
Los peores pronósticos se cumplieron y el petrolero «Prestige» se
hundió en alta mar, poco antes de las cinco de la tarde de ayer,
después de que horas antes se partiera en dos. Aunque los expertos
confían en que el combustible del petrolero se solidifique en el
fondo del mar, la marea negra acumulada durante los pasados días ya
amenaza a las rías Bajas. El hundimiento se produjo a 145 millas de
las viguesas islas Cíes, frente a la costa portuguesa.
En medio de un rifirafe entre las autoridades españolas y portuguesas sobre la jurisdicción de las aguas en las que tuvo lugar la ruptura del buque, el «Prestige» desapareció frente a las costas portuguesas y en una diagonal de 145 millas de las costas Cíes. Con el buque se hundieron 70.000 toneladas de combustible que están siendo objeto de diversos pronósticos. El delegado del Gobierno en Galicia, Arsenio Fernández de Mesa, que transmitió la opinión de una comisión de expertos formados por ingenieros navales del Grupo Izar, cree que es probable que el combustible se solidifique en el fondo del mar ante las bajas temperaturas y la presión.
El investigador del CSIC, Antonio Cortés, también opina que habría sido peor que el barco se hubiera mantenido en la superficie, ya que el fuel se habría derramado. Sin embargo en Galicia las previsiones no son tan halagüeñas, ante la marea negra que provocó la fisura de uno de los tanques de combustible el pasado día 13, y que ya ha llegado a diversos puntos de la costa gallega, y ha motivado que se prohíba la pesca y el marisqueo en toda la costa de A Coruña. El Ayuntamiento de Vigo ha movilizado a más de mil efectivos para hacer frente a la posible llegada de la mancha a su ría.
Según informó el Ministerio de Fomento, se han colocado barreras anticontaminación en A Malata, la zona de los Castillos de la ría de Ferrol, Lorbé, Sada, O Pedrido, Pontedeume, O Burgo, Anllóns, Corme y Ponte do Porto. Defensa prevé finalizar hoy las tareas de limpieza de la contaminación producida por el vertido de fuel oil en la playa de Malpica y en la de Cayón. La Xunta de Galicia pagará 30 euros diarios durante un mes a los damnificados por la marea negra del vertido del «Prestige», pero asegura que su apoyo no tendrá límites.
Desde el Gobierno central, el vicepresidente, Mariano Rajoy, anunció ayer ayudas directas y beneficios fiscales para una bolsa de afectados que podría engordar considerablemente en el caso de que se siga extendiendo el vertido por las rías Bajas. El sindicato CIG-Mar ha pedido un plan integral de ayudas para los sectores dependientes de la actividad pesquera y ya ha anunciado manifestaciones de protesta por la escasez de la cuantía.