Los restos del avión Fokker F28 desaparecido durante cuatro días en Perú con 46 personas, entre ellas una ciudadana española, fueron encontrados ayer en las cercanías de la ciudad nororiental de Chachapoyas, sin que haya indicios de supervivientes. La aeronave fue descubierta por la mañana por un helicóptero de la Fuerza Aérea de Perú, en medio de adversas condiciones del clima que dificultan las labores de rescate de las brigadas terrestres. El grupo de rescate que llegó hasta la aeronave informó de que el avión se estrelló contra el cerro «Coloque», a 3.300 metros de altitud y a diez millas de la ciudad nororiental peruana de Chachapoyas.
El ministro de Transportes de Perú, Javier Reátegui, confirmó la información y expresó las condolencias del Gobierno peruano a los familiares de las 46 personas que viajaban en la nave, cuyos restos están dispersos en un área de 200 a 400 metros. «Lamentablemente ha habido un impacto directo a tres mil metros de altura» acotó Reátegui, quien dijo que en la zona trabajan patrullas de rescate de la Fuerza Aérea, la Policía Nacional y lugareños.
En la lista de pasajeros figura la española Isabel Pérez García, quien visitaba Perú como turista acompañada por su novio, de origen peruano. Pérez, de 30 años y natural de Gijón (Asturias), y Javier Jaimes Zubieta, de 39 años, de origen peruano pero nacionalizado estadounidense, se encontraban de vacaciones en Perú desde el pasado 16 de diciembre. Según la relación de pasajeros facilitada por la compañía, en el avión viajaban también el belga Cristophe Dubois, la portuguesa Sofía Porfirio, el cubano Yuri Rangel y los holandeses Ronald Emmanuel y Johanes Zondag.