El fiscal solicitó ayer dos años de prisión para un joven al que se acusa de enfrentarse a la Guardia Civil cuando los agentes acudieron a detenerlo. Además, el fiscal pide una multa de 600 euros por las supuestas lesiones que causó a uno de los agentes de la Guardia Civil. Ayer, el juicio, tras declarar el acusado, los testigos y los agentes de la Benemérita que le detuvieron, quedó visto para sentencia en el Juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa.
El suceso por el que se celebró juicio ocurrió en agosto del año pasado en las inmediaciones de una discoteca del municipio de Sant Antoni.
El acusado, el joven cordobés M.R.C., de vacaciones en la isla, se separó de los dos amigos que le acompañaban, que no volvieron a verle hasta dos días después en el hospital de Can Misses, con el brazo fracturado y un golpe en la cabeza.