EFE-MÉXICO
La turista española Ana María Ríos Bemposta salió ayer bajo fianza de la cárcel municipal de Cancún tras permanecer en ella una semana al ser desestimado el cargo más grave que había en su contra, el de posesión de un detonador de uso exclusivo del Ejército. Ríos Bemposta, de 26 años, no hizo declaraciones a la salida del penal donde ha permanecido los últimos siete días.
A las 1.45 hora local la joven gallega dejó la cárcel después de que sus abogados pagasen en el juzgado que lleva su caso una fianza de casi 22.000 pesos (unos 2.000 dólares). Hasta hace unas horas Ríos Bemposta, de 26 años, era considerada «presunta responsable» de violar la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos en la modalidad de posesión de cartuchos y artificios de guerra del Ejército y Fuerza Aérea.
La joven dejó el centro de reclusión acompañada del cónsul general de España en México, Herminio Morales, del honorario en Cancún, el empresario Javier Marañón, de su madre, Gloria Bemposta, y de su esposo, Marcos Dasilva. Los familiares de la joven se han alojado estos días en el hotel Oasis América, al que podría haber sido trasladada la joven.
La libertad de que goza la joven turista española está condicionada, ya que por el momento no puede salir de México, explicó a los medios Javier Marañón, quien apuntó que hay satisfacción pero «sigue su proceso, sigue a disposición del juez». Ríos Bemposta continúa en calidad de «inculpada» por la tenencia de balas y cartuchos.