C. CUEVAS
El avión de Air Nostrum que realizó el vuelo Iberia 8101 entre Eivissa y Palma apareció ayer por la mañana con el precinto roto. Por motivos de seguridad dicho dispositivo se coloca en los aviones que pasan la noche en el aeropuerto.
En el momento de acceder a la nave poco antes de la 7,30 horas, la hora prevista para que partiera el avión con destino Palma, la tripulación descubrió que el precinto estaba roto.
Aplicando el protocolo de seguridad en estos casos el comandante de la aeronave avisó a la Guardia Civil para que comprobara la seguridad del avión.
El Instituto Armado y la unidad de éste especialista en explosivos, CEDAX, realizaron una exhaustiva revisión del avión de casi dos horas. «En materia de seguridad es mejor no escatimar con el tiempo, en la compañía queremos que nuestros pasajeros vuelen seguros» afirmó ayer el portavoz de Air Nostrum, Antonio Denó.
Cuando la Guardia Civil consideró que no existía ningún riesgo en el interior de la aeronave la compañía procedió a embarcar al pasaje y el avión despegó con un retraso de unas dos horas sobre el tiempo previsto para la salida, aunque no afectó al resto de vuelos de la compañía.
Según confirmó Denó, es la primera vez que ocurre este tipo de incidente en aviones de la compañía.
Desde AENA aseguraron que este problema no afectó en ningún momento a la operatividad del resto del aeropuerto. Y confirmaron que dejaban la investigación en manos de la Guardia Civil dado que no entra dentro su competencia este tipo de pesquisas al no requerir el comandante de la aeronave ninguna alerta a la terminal.
La Guardia Civil ha iniciado una investigación para descubrir exactamente lo ocurrido, tal y como confirmó el delegado insular.