El cambio de trayectoria del huracán «Dean» en la madrugada de ayer, al dirigirse al sur de la Riviera Maya y afectar de lleno a la zona de Chetumal, frontera con Belice, evitó que afectará a Cancún y todos los complejos vacacionales baleares en la Riviera Maya, que solo sufrieron daños superficiales en piscinas, jardineria, palapas y en las playas. En estos momentos, todos los hoteles se encuentran operativos y a la espera de que se normalice las actividades en el aeropuertode Cancún.
El huracán, que entró en la península del Yucatán con fuerza 5, la máxima según la escala Saffir-Simpson, se debilitó, lo que propició que los daños ocasionados por el viento en las zonas turísticas fueran mínimos, según indicaban ayer representantes de las cadenas hoteleras ibicencas Palladium y Sirenis.
Desde la Asociación Hotelera de Quintana Roo, estado mexicano que engloba a Cancún, Puerto Morelos, Playa del Carmen y Tulum, principales zonas turísticas en el caribe mexicano, indicaban ayer que «por suerte, el huracán ha pasado de refilón, no afectando para nada a Cancún y las zonas turísticas, de ahí que tanto el aeropuerto de Cancún como los hoteles y complejos, tras las labores de limpieza, estén totalmente operativos».