La Audiencia Provincial tiene previsto resolver a finales de este mes una docena de casos de drogas relacionados con Eivissa. Entre los juicios más significativos figuran las causas abiertas después de que la Guardia Civil desarticulara el pasado verano dos grupos de italianos a los que se s intervino diversas cantidades de droga. En los registros se decomisaron 3.208 pastillas de éxtasis, tres litros de ketamina y hongos alucinógenos. Los principales encausados se juegan seis años de prisión. Uno de los grupos tenía su «domicilio» en una casa de la carretera de Sant Josep y el otro en la carretera de Sant Joan. La Guardia Civil encontró la droga repartida en distintas habitaciones de ambos inmuebles, así como en el jardín.
El fiscal, en otro caso distinto, también ha pedido siete años de prisión para un alemán al que la policía requisó en el interior de un Mercedes medio kilo de heroína. El vehículo fue parado en el casco urbano de Eivissa y al acusado también se le intervinieron 7.500 euros que llevaba encima. La misma pena de siete años se reclama para otro supuesto traficante que cayó en un control de vehículo en Vila que llevó a cabo el Cuerpo Nacional de Policía en agosto de 2007.
Los agentes, tras dar el alto un coche en la calle Pais Valencià, encontraron cristal de éxtasis, una bolsa de casi cien gramos, escondida en el respaldo del asiento trasero de un coche que pertenecía a otra persona distinta a la que finalmente ha sido procesada. Tras un registro domiciliario se aprehendieron, además, cien gramos de hachís.
El tribunal, como suele ser habitual, también tiene previsto ver numerosos casos de jóvenes que fueron descubiertos con pequeñas cantidades de estupefacientes cuando presuntamente traficaban en zonas de ocio de la isla, especialmente en las puertas de establecimientos de Platja den Bossa y de Sant Antoni. El ministerio público ha formulado escritos de acusación en los que se piden penas que van desde los cuatro años de cárcel hasta los seis.
Asimismo, el fiscal pide tres años y dos meses de prisión para un magrebí al que la policía sorprendió en la Avenida Pedro Matutes Noguera cuando dentro de un vehículo supuestamente vendía a otra persona 0,798 miligramos de cocaína, cantidad por la que presuntamente se entregó 45 euros.