La policía detuvo a un hombre de 40 años que se vio implicado en una pelea con un amigo suyo al que causó múltiples heridas después de que ambos se enzarzaran en una discusión en un bar de Vila. Una vez en el juzgado, después de que agentes de Comisaría concluyeran el atestado y pusieran al sospechoso a disposición judicial, la víctima relató que todo había sido producto de los nervios del agresor y que no quería cobrar ninguna indemnización por las heridas que presuntamente le ocasionó. Según la información recogida por este periódico, el afectado presentaba numerosas contusiones en la cara como consecuencia de una serie de impactos que recibió en el rostro.
El acusado, por su parte, no presentaba otras lesiones, aparte de un hinchazón en los nudillos de la mano. Todo induce a pensar que el perjudicado ni siquiera se defendió. La disputa, al parecer, se inició por una nadería.
El sospechoso fue presentado ante el juez como supuesto autor de un delito de lesiones. El fiscal pidió para él una pena de seis meses de multa, condena que quedaría reducida a cuatro meses si éste, en un juicio rápido, se conformaba con el relato de los hechos imputados.