El tricampeón del mundo de F1 Nikki Lauda podrá volver a conducir su querido Smart Cabriolet por las carreteras de Eivissa. Un vecino de Jesús lo encontró ayer tarde un día después de que el piloto pidiera ayuda en Ultima Hora para poder recuperar su coche después de que éste fuera sustraído de su mansión de Sant Josep, un suceso que motivó que el ex piloto austriaco volara directamente desde su país a Eivissa para conocer los pormenores del robo. Lauda aseguró que muchas veces se trasladaba a la isla por el placer que para él suponía conducir este vehículo por la isla, un modelo de serie que como único distintivo tiene el nombre del piloto grabado bajo la matrícula del coche.
El descubridor del coche paseaba con su hija por la calle sa Gavina cuando se percató de la presencia del Smart de Lauda. El coche estaba perfectamente cerrado, sin ningún desperfecto aparente y con objetos en su interior que serán motivo de averiguaciones policiales. La Policía Local de Santa Eulària se hizo cargo del Smart.
Nikki Lauda prometió una recompensa «negociable» por la recuperación de un coche al que dijo tener «especial cariño».