El denominado clan del Barrendero fue desmantelado en junio después de que durante este año la policía hubiera desarticulado la estructura de otras tres familias relacionadas con sa Penya y a las que históricamente se les atribuía el control de la droga en este barrio. El clan del Barrendero cayó después de que hubieran sido detenidos los principales integrantes de los de la Rula, de la Sevillana y del Perriqui.
La operación se llevó a cabo en la calle del Alt después que el matrimonio acusado, directamente emparentado con la Rula, se hubiera presuntamente quedado con el control del tráfico de estupefacientes en sa Penya tras ser clausurados los puntos de venta que explotaban los anteriores clanes, así como una casa en ruinas que era utilizada como almacén.