Un residente sudamericano fue ayer condenado por el juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa a pagar una multa de 720 euros después de declararse culpable de simular un robo en su cuenta corriente para tapar una noche de desenfreno. El sospechoso, que esa noche se gastó 1.625 euros, en consumiciones ene Bar Tanit y en el Club Madam, acudió a Comisaría el 16 de abril del año pasado afirmando que le había hecho once pagos sin su consentimiento en su cuenta.
Las investigaciones efectuadas por la policía pusieron al descubierto la treta. El acusado no sólo fue reconocido por las mujeres y empleados de seguridad de los locales en los que figuraban los pagos sino que también su imagen figuraba en las grabaciones de seguridad de al menos uno de los establecimientos.