J.JIMÉNEZ-MICHELS
La Policía Judicial de la Guardia Civil está investigando las circunstancias en las que se produjo la muerte de un albañil que fue hallado en medio de un gran charco de sangre en el baño de un hostal de la localidad mallorquina de Peguera. La víctima, de 42 años, presentaba un golpe en la cabeza y estaba encajado entre la bañera y el wáter.
El hallazgo se produjo sobre las dos de la tarde, cuando la sangre se filtró por debajo de la puerta a la calle y la Guardia Civil recibió aviso. Los agentes entraron en la habitación y encontraron grandes manchas de sangre. El hedor era insoportable y tuvieron que utilizar mascarillas para protegerse.
Golpe
El fallecido llevaba entre tres y cuatro días sin vida, según estimó el médico forense, y presentaba también un golpe en la cabeza. De la contusión, sin embargo, no había brotado la sangre que apareció en el baño.
Los investigadores identificaron el cuerpo y contactaron con su familia. Se trata de un albañil de 42 años que era conocido en Peguera y que tenía alquilada la habitación del hostal, junto a la playa Palmira. E
l Juzgado de Instrucción número 10 de Palma ha abierto una investigación para aclarar cuál fue la causa de la muerte y está previsto que hoy por la mañana se lleve a cabo la autopsia.
A pesar del golpe que presentaba en la cabeza, la Policía Judicial no cree que la muerte sea violenta y baraja como posibilidad un accidente. Sin embargo, la cantidad de sangre que apareció en el baño es lo que desconcierta a los agentes.
La investigación se centró en un callejón que da al baño, y que es bastante angosto. El cadáver fue sacado por la empresa funeraria por la playa de Palmira, donde esperaba la furgoneta fúnebre.