La Fiscalía de Eivissa ha solicitado al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil que realice un estudio e informe de cuántas antenas de telefonía móvil hay instaladas en azoteas de edificios de Jesús y si alguna de ellas se encuentra cerca de algún colegio, residencia de ancianos o centro médico, informaron ayer fuentes judiciales.
Fiscalía también ha pedido al SEPRONA que informe de cuál es el organismo competente a la hora de conceder autorizaciones para instalar antenas de telefonía móvil en las azoteas.
Estas medidas son consecuencia de un denuncia presentada por un particular en Fiscalía en la que se apunta la sospecha de que las radiaciones que emiten estas antenas puedan estar causando problemas de salud a los niños, como dolores de cabeza o alteraciones del sueño.
Desde 2005
No es la primera vez que los vecinos de Jesús protestan por la instalación de antenas de telefonía móvil en el pueblo, aunque en esta ocasión la protesta es contra antenas o repetidores colocados en azoteas. En diciembre de 2005, la Policía Local de Santa Eulària ordenó la paralización de las obras de ampliación de una de las dos antenas de telefonía móvil (al parecer entonces ilegales) instaladas en la entrada de Jesús. El asunto acabó en los tribunales.
En aquel año las operadoras de telefonía móvil aseguraron que para atender la creciente demanda de Eivissa necesitaban instalar más antenas de telefonía móvil y que, por otra parte, resultaba «inviable» plantear su instalación fuera de los núcleos urbanos.
Insistieron en que no hay ningún riesgo para la salud de la población y recordaron con insistencia que la demanda de cobertura se satura en verano por el gran incremento de población. Las empresas de telefonía móvil proyectaban en 2005 instalar muchas antenas más en los núcleos urbanos de la isla y, para ello, pidieron «una mayor flexibilidad de las autoridades locales».
También en el municipio de Sant Antoni ha habido protestas e igualmente en Formentera, en concreto por la instalación de una antena de telefonía móvil cerca de un colegio.
La 'guerra' de Binissalem
Tras años de reivindicaciones y protestas vecinales, las antenas de telefonía móvil abandonarán el casco urbano de la localidad de Binissalem en tres meses. El Ayuntamiento anunció el traslado a un solar que es de titularidad municipal ubicado en un polígono industrial.