Las máquinas trabajan a pleno rendimiento para que en el plazo máximo de 18 meses Eivissa cuente con su nueva Comisaría de Policía. «Después de 15 años de lucha hoy (por ayer) tenemos una alegría más. Hemos dado un paso más. Esperemos que al final del año que viene tengamos una explosión de alegría y podamos inaugurarlo después de mucho esfuerzo para conseguir lo que parecía imposible». Son palabras del jefe superior del Cuerpo Nacional de Policía en Balears, Bartomeu Campaner, quien ayer se desplazó a Eivissa junto con el delegado del Gobierno, Ramon Socías, para presentar oficialmente el proyecto del nuevo edificio que se está construyendo en su antiguo emplazamiento sobre una parcela de 7.177 metros, un proyecto para el que se han invertido más de 7 millones de euros.
El nuevo inmueble, como ya se informó en su día, contará con tres plantas y un sótano y estará dotado de infraestructuras modernas requeridas para el trabajo de los agentes, como vestuarios y una galería de tiro. Los ciudadanos y los vehículos del CNP accederán a las instalaciones por ala avenida de la Paz. En el interior habrá una zona de aparcamiento para la policía y en el exterior para el público.
Edificio «flexible»
El arquitecto que dirige la obra, Adolfo Morán, destacó que se ha intentado recuperar, como era característico en edificios funcionales, un patio de operaciones en el que confluyen los distintos módulos que albergarán los distintos despachos y secciones policiales. «La idea es que la unidades puedan operar independientemente, con sus horarios y sistemas de trabajo, sin que necesariamente interfieran en las otras», resaltó Morán. El arquitecto también atribuyó al proyecto los calificativos de «flexible y sostenible». Todo ello tras explicar que con estos términos se refería a que se había pensado especialmente en el futuro con el fin de que el interior de inmueble pueda ser adaptado a sus necesidad al tiempo que va a ser equipado con materiales que, según sus palabra, «garantizarán su perdurabilidad».
La Administración tiene pendiente ahora solucionar el uso que se va a dar ahora a los restantes 8.466 metros cuadrados que quedan libres en la parcela. Durante los últimos años se barajó la posibilidad de que la Policía Local de Eivissa también contara con instalaciones en el lugar e, incluso, la construcción de Viviendas de Protección Oficial, planes que fueron poco a poco descartándose.
Esperpento en la casa cuartel de la Guardia Civil