Ahora tendrá tiempo para reconciliarse con su familia. Un joven de Bilbao de 31 años detenido en Eivissa al ser sorprendido identificándose con un DNI que no era el suyo tras venir a la Isla huyendo de su familia ha sido absuelto del presunto delito de usurpación del estado civil que se le imputaba.
La juez Martina Rodríguez, titular del Juzgado de lo Penal número y responsable de esta sentencia ha tomado esta decisión al entender que con la suplantación que dicha persona realizó no fue ideada para cometer ningún delito o derecho exclusivo que correspondiera al titular real del documento. El sospechoso se enfrentaba a una condena de 20 meses de prisión.
Historial de droga
La suplantación se descubrió el 8 de agosto de 2009 en la discoteca Bora-Bora cuando personal de seguridad de este establecimiento lo sorprendió tomando drogas y le requirió su DNI.
La investigación policial realizada tras su arresto reveló que el acusado, con un historial de toxicomanía de más de doce años, había huido de su familia tras una fuerte discusión con su padre en los días previos a su escapada. Eivissa fue su destino final después de irse a Barcelona y alojarse durante tres días en el hotel Astoria. Luego, compró un billete de avión para llegar a la Isla, lugar en el que fue descubierto tras dos días de estancia en un hostal. Al portero que lo retuvo hasta la llegada de la Guardia Civil, le sorprendió también que estuviera en poder de gran cantidad de dinero.
La sentencia, al respecto, se apoya en una resolución del Tribunal Supremo en la que incide en la cuestión de la exclusividad del dueño real de la documentación. «Obrar como otra persona para cobrar un dinero, que es de éste último; simular ser la viuda de otro para ejercitar un derecho o cobrar una herencia», explica la sentencia. A todo ello se añade que las acciones realizadas por el acusado bien podía haberlas hecho él mismo con su propia identidad sin ningún problema.