J.A.C.T, acusado de provocar un incendio en el número 62 de la calle Madrid de Vila el 21 de diciembre de 2010, aceptó ayer cumplir ocho meses de prisión y tres años de tratamiento médico externo declarándose culpable de los hechos.
Además, durante la vista oral que se celebró en el Juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa ayer por la mañana, el joven también aceptó pagar una indemnización a la aseguradora Mapfre de 67.097,83 euros por los daños originados en el 4º Primera de este edificio y a Línea Directa de 10.195 por la pérdida de uno de los coches que ardió.
Sin embargo, el acusado, que declaró por videoconferencia al encontrarse preso en la cárcel de Palma de Mallorca tras provocar el 29 de octubre de 2011 otro incendio en el que murió una mujer, no aceptó pagar las cantidades solicitadas por D.P. su compañero de piso en la calle Madrid, y de A.T. una vecina de la vivienda superior.
Su compañero y los padres de su novia aseguraron que durante el fuego perdió cerca de 1.400 euros en efectivo que guardaba en la vivienda como parte de su sueldo que le pagaron en mano, todos sus efectos personales, su ropa, sus herramientas de trabajo, un televisor, una consola y un teléfono móvil Nokia. Por ello, solicitaron ser indemnizados con 3.889,23 euros, una cantidad que será la jueza la que decida si es abonada por J.A.C.T cuando se conozca la resolución definitiva del juicio, que ayer quedó definitivamente visto para sentencia.
Los hechos
El incendio se originó sobre las 17,30 horas en el 4º Primera del número 62 de la calle Madrid de Vila, un edificio de cinco alturas y con dos viviendas por planta.
Según las investigaciones, el fuego comenzó en el salón principal de la vivienda, generando mucho humo y, aunque no hubo heridos, las fuerzas de seguridad tuvieron que desalojar a más de 20 vecinos que se encontraban en ese momento en el edificio y que tuvieron que pasar la noche fuera de sus casas.