Dos agentes de la Guardia Civil de Tráfico de Eivissa que acababan de terminar su turno de trabajo se toparon el jueves por la noche, cada uno en su coche particular, en el túnel de la autovía de Sant Antoni en dirección a esta localidad con un turismo que circulaba en sentido contrario, es decir, en dirección a Eivissa, informaron ayer fuentes del Instituto Armado.
Los dos agentes de Tráfico lograron con sus vehículos arrinconar al conductor del turismo que circulaba en dirección contraria y darle alto. Los hechos ocurrieron sobre las diez menos cuarto de la noche.
El conductor, que iba a los mandos de un Seat Ibiza de alquiler, se encontraba en un muy avanzado estado de embriaguez, señalaron desde la Guardia Civil.