Una policía nacional que acudió al domicilio de la primera víctima del presunto pederasta de Ciudad Lineal ha dicho que la niña «estaba asustada y muy nerviosa» y que, abrazada a su madre, no paraba de preguntar: «¿va a volver este señor? Me dijo que iba a volver».
Lo ha dicho en la sexta sesión de la vista oral que se ha celebrado esta mañana en la Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Madrid contra Antonio Ángel Ortiz, de 44 años, para quien la Fiscalía pide 77 años de prisión por secuestrar y agredir sexualmente a cuatro niñas.
Esta agente patrullaba el 24 de septiembre de 2013 en el distrito de San Blas cuando recibió un aviso de un presunto abuso sexual a una menor, por lo que se dirigió al domicilio de la familia, donde dos hombres la habían llevado tras encontrarla «asustada y muy nerviosa» en una gasolinera donde había sido abandonada.
La madre explicó que la niña, de cinco años, había bajado a jugar al parque con unas amigas pero que la veía desde el domicilio hasta que en un momento dado se percató de que la había perdido de vista.
Abrazada todo el tiempo a su madre, la niña explicó a la agente que se había bajado al parque habitual a jugar pero que se fue con sus amigas a otro parque. Allí, un hombre se acercó y tras decirle que era amigo de su madre la convenció para subirse a un coche, que fue donde presuntamente la agredió sexualmente.
«Lo único que explicó del hombre es que era de raza blanca y de complexión muy fuerte pero no supo decir nada más», ha señalado la policía sobre la descripción que ofreció la pequeña, quien también habló de un coche de color gris sin poder dar más detalles.
Y no paraba de preguntar siempre lo mismo: «¿va a volver este señor? Me dijo que iba a volver».