Un curandero sudafricano ha sido condenado a cadena perpetua por el asesinato de una mujer albina para utilizar en un ritual partes del cuerpo de la víctima, informa este jueves el portal de noticias News24.
El crimen se produjo en agosto de 2015, después de que el curandero, que responde al nombre de Bhekukufa Lindeni Gumede y tiene 65 años, contratara a sus tres cómplices para que asesinaran a una mujer albina, para elaborar, con partes de su cuerpo, un ungüento que le traería riqueza.
La víctima, Thandazile Mpunzi, de 20 años y que había sido novia de uno de sus verdugos, fue estrangulada y apuñalada por los tres cómplices de Gumede, junto al que desmembraron el cadáver al día siguiente en la misma localidad de la provincia oriental de KwaZulu-Natal en la que asesinaron a la joven.
Los tres ejecutores fueron detenidos meses antes que el curandero, y cumplen penas de entre 18 y 20 años de cárcel.
La creencia en las propiedades sobrenaturales de sus huesos y otras partes del cuerpo es una amenaza para las personas con albinismo en algunos países africanos, en los que son asesinados para elaborar ungüentos o hacer rituales y sus tumbas profanadas para robar sus restos.
Uno de los países más afectados por este fenómeno es Malaui, donde el Gobierno y organizaciones cívicas han puesto en marcha campañas informativas para acabar con una superstición que se ha convertido en negocio para algunos y en una tragedia para los albinos.