Ya son nueve semanas de MasterChef Celebrity 5, nueve semanas en las que los concursantes han demostrado su talento culinario, han derrochado desparpajo y, muchos, han hecho gala de su humor característico. Es el caso de Florentino Fernández, quien ha explotado su faceta de cómico al máximo y, en ocasiones, ha sacado un alter ego llamado Flosie, personaje que ha molestado a muchos espectadores por las connotaciones que tiene.
Josie es uno de los concursantes más sorprendentes de la edición. El estilista, habitual colaborador de Zapeando y diseñador de los vestidos de Cristina Pedroche para las Campanadas, entre otras cosas, ha mostrado su faceta más culta, divertida y una sorprendente habilidad en la cocina que hace que muchos apuesten por su victoria.
Pero a la vez que participa, con creces, en el talent culinario, hace gala de sus trajes, sus trucos de cuidado personal y demás elementos relacionados con la belleza y la moda. Quizá todo ello y su forma de ser han inspirado a Florentino Fernández para crear a Flosie, la unión, en teoría, de Flo y Josie.
Pero lo cierto es que el actor está interpretando al ya conocido Crispín Klander, personaje homosexual de Esta noche cruzamos el Mississippi que ligaba con Pepe Navarro en la década de los 90.
El cómico parece que ha desenterrado el humor centrado en el estereotipo de hombre gay, algo que los usuarios de las redes han criticado ya que lo consideran homófobo y no ven bien que se emplee en un programa de máxima audiencia en la cadena pública.
Y es que, tal y como muchos han apuntado, lo llama Flosie, pero en realidad no tiene nada de Josie, sino que sencillamente es un hombre afeminado que puede resultar ofensivo porque se centra en un tópico que se está usando para hacer humor.
Por esta razón, aunque se lleva tiempo comentando, Florentino Fernández se ha convertido en trending topic este miércoles ante la cantidad de tuits mencionando este asunto y parafraseando un reciente artículo de El País.
En connivencia con el gobierno, también a través de la ley mordaza, querrán que dejemos de ver chistes sobre tendencias sexuales, espiritualidad, clases sociales, extranjeros y demás como la punta de lanza del demonio, déjense de tanta defensa rancia, son peores que una dictadura, al menos allí se sabía quién era el bueno y el malo, en este fango nos quieren hundir la moral a los heteros, somos culpables de ser el 90% de la población, a ver si saben defenderse dejando la libertad de expresión en paz y dejando de abanderar maniqueísmos sin tanta hipocresía.