Iker Jiménez volvió a responder a las críticas que está recibiendo, tanto el presentador de Cuatro como su equipo, desde la cobertura de la DANA de Valencia que se realizó en el programa ‘Horizonte’. Así, Jiménez aprovechó el final de la emisión de ‘Cuarto Milenio’ para hacer una contundente reflexión.
El presentador aseguró que había sido objeto de un intento de desprestigio, explicando que le hicieron un dossier para hallar aspectos cuestionables en su vida personal, pero no dio resultado: «A mí no me van a encontrar con la nariz empolvada, sacándome a rastras de un chiringuito. Entonces, como yo no me drogo, no me emborracho, no me voy de putiferio, no me voy con jovencitos y como no soy un depravado, la circunstancia es un lenguaje que se entiende», sentenció Jiménez.
Ante la oleada de «ataques y críticas» que el presentador de Cuatro ha estado recibiendo a lo largo de los últimos meses, Jiménez explica que prefiere «pensar que en ocasiones la neurona no rige muy bien».
Ya por último, el presentador de ‘Cuarto Milenio’ dijo que la vida que tiene en el programa y la que tiene en su casa, no se diferencian prácticamente. En este sentido, explicó que «No digo que sea bueno o malo, solo creo que hay cierta coherencia en ello.