Fermín Cacho, campeón olímpico en Barcelona 92 y plata en Atlanta 96, declaró ayer a su llegada a Madrid que tiene intención de «agotar todas las esperanzas de ir a Sidney», aunque añadió que tan sólo viajará a la cita olímpica si se encuentra en plenas condiciones de luchar por la victoria.
El atleta soriano se resintió el domingo en la ciudad italiana de Padua de una lesión en el tendón de Aquiles de su pierna izquierda y hoy será sometido a una resonancia magnética que desvelará finalmente si irá o no en Sidney. Un Cacho «desilusionado» señaló a su llegada al aeropuerto de Barajas su intención de «agotar todas las esperanzas de ir a Sidney».
«Hasta hace dos días era la persona más optimista del mundo. Ahora, debo recuperarme también psicológicamente y esperar que el resultado de la prueba sea lo más favorable posible para no estar parado mucho tiempo porque queda muy poco tiempo para Sidney». «Cuando te entrenas al cien por cien al cuerpo le pides mucho más de lo que puede rendir y ocurre que poco a poco el cuerpo se agota físicamente y aparecen lesiones. No hay que darle más vueltas y hay que tratar de sobreponerse», indicó Cacho.