FC Barcelona | 3 |
Inter | 0 |
Barcelona: Bonano, Gabri, Puyol, De Boer, Reiziger, Cocu, Overmars, Motta, Xavi, Saviola y Kluivert.
Cambios: Rochemback por Overmars, Mendieta por Motta y Luis Enrique por Saviola.
INTER: Toldo, J. Zanetti, Cannavaro, Gamarra, Córdoba, Di Biagio, Dalmat, Morfeo, C. Zanetti, Recoba y Vieri.
Cambios: Okan por Di Biagio y Kallon por Morfeo.
Arbitro: Anders Frisk (SUE). Mostró la cartulina amarilla a Córdoba y Cristiano Zanetti. Expulsó con roja directa a Recoba (m.80).
Goles:1-0 Minuto 7, Saviola.
2-0 Minuto 29, Cocu.
3-0, Minuto 68, Kluivert.
David Alvarez|BARCELONA
El Barcelona de las dos caras, ese capaz de protagonizar una crisis en la Liga que ha forzado la marcha de entrenador y presidente y que se mantenía invicto en la Liga de Campeones, confirmó su esquizofrenia con un recital ante el Inter de Milán (3-0) en su reencuentro con Europa.
Radomir Antic, el técnico que relevó a Louis van Gaal, ya tiene a su nuevo público en el bolsillo, Patrick Kluivert se reencontró con el gol, Luis Enrique reapareció y el equipo logró un récord en competición continental de once triunfos consecutivos. La clave, o al menos una de las que propició una jornada tan redonda para el Barcelona, fue la rapidez con la que el marcador se inclinó del bando azulgrana.
El primer tanto, el de Javier Saviola, llegó cuando tan sólo habían transcurrido siete minutos de partido, después de que el argentino recibiese un servicio de Xavi y se internase en el área para batir a Toldo. El equipo de Héctor Cúper reaccionó al golpe encajado y empezó a amenazar con balones muy peligrosos al área que siempre buscaban a Vieri. El gol se paseaba cada vez más por el área de Bonano, pero la defensa y el guardameta del Barcelona resistieron en esta primera mitad a fases en las que la posesión italiana era absoluta.
Los barcelonistas parecieron apostar descaradamente por el contragolpe, aunque en alguna ocasión también intentaron dormir el partido, y, entre una cosa y la otra, llegó el segundo tanto azulgrana. Primero, Puyol salvó a su equipo del empate en el minuto 28, cuando le quitó el balón de la bota a Vieri, que se había plantado en solitario ante Bonano tras romper el fuera de juego.
En la jugada inmediata, Saviola estuvo a punto de volver a marcar, pero Toldo despejó a córner sin saber que daba paso de este modo al segundo tanto azulgrana. El Barcelona ejecutó el saque de esquina y el balón llegó a Kluivert, cuyo remate despejó el guardameta del Inter sobre la líinea de gol, pero a las botas de Cocu, quien sólo tuvo que empujar el esférico al fondo de la red.
A diez minutos del final fue el equipo italiano el que estuvo a punto de sacar provecho de un córner, pero a los jugadores de Héctor Cúper les faltó acierto para recortar diferencias en esa y en posteriores acciones previas al descanso, pese al dominio que establecieron sobre el campo. El Inter encerró también atrás al Barcelona en la reanudación, aunque los contragolpes de los azulgrana eran peligrosísimos, como el que protagonizó Overmars en el minuto 53, aunque Toldo le ganó el mano a mano.
Cocu estrelló el balón en el poste dos minutos después y, cuando al equipo de Cúper empezaba a pesarle el cansancio, llegó el tercer tanto barcelonista, obra de Kluivert, que culminaba una jugada protagonizada por Saviola y que se reencontraba de este modo con el gol. Al Inter se le cayó el mundo encima y los futbolistas del Barcelona, muy crecidos, empezaron a devolver parte de su deuda a la afición con juego de pases en corto, ocasiones y entrega absoluta. La aportación de Radomir Antic fue la de introducir cambios de refresco, Rochemback y Mendieta, y la de poner primero a calentar en la banda al capitán Luis Enrique, cuya presencia fue muy aplaudida por la grada, para darle entrada en el minuto 81 tras más de tres meses de ausencia por lesión. Tan sólo un minuto antes, Recoba, en un acto de impotencia, había dejado a su equipo en inferioridad numérica por pisar el rostro de Puyol en una acción que el colegiado, tras consultar a su asistente, no dudó en sancionar con cartulina roja. El Barcelona, capitaneado por Luis Enrique, dedicó los últimos minutos del partido a regalarse a su afición y a culminar una nueva evidencia de su doble personalidad.