La Real Federación Española de Atletismo (RFEA) se mantiene escéptica respecto al récord nacional de 110 metros vallas que consiguió el atleta ibicenco Felipe Vivancos el pasado domingo en Vitoria.
Los jueves del organismo federativo nacional no han redactado el expediente que otorga al vallista del CA Pitiús la marca que le daría la plaza para participar en los Juegos Olímpicos de Atenas. Y es que tienen previsto realizar la comisión técnica que trate este asunto en el campeonato de España que se celebrará el 31 de julio y 1 de agosto en Almería. Hasta entonces, Vivancos no sabrá si su registró ha sido válido o no. Además, los jueces de la Federación Vasca son los que deben redactar el documento.
El problema de esta marca reside en que los jueces de la Federación Alavesa sí dan como válido el tiempo de 13"41, mientras que los de la nacional no, debido a un problema de calibraje.
Pese a que no se sabe si esa marca será válida o no, la Federación Española ha decidido volcarse con el atleta pitiuso y darle todo tipo de facilidades para que, de no conseguir el registro, pueda batirlo en otras pruebas.
Así, Vivancos ya tiene programada una competición el próximo sábado en Barcelona, donde intentará, una vez más, la marca mínima para competir en las Olimpiadas de Atenas, y de esta forma acallar cualquier tipo de duda sobre su tiempo que todavía está en el aire, y sobre su capacidad para conseguirla.
En caso de que en la Ciudad Condal no consiga batir el tiempo mínimo (13"72), el órgano federativo está dispuesto a enviarle a la Golden League de Estocolmo para que siga intentándolo. En caso de no lograrlo allí ya debería hacerlo en el campeonato de España de Almería.
En cuanto a la moral del vallista de Eivissa, hay que destacar que según Toni Roig, entrenador del CA Pitiús, es «muy alta y eso me tranquiliza», aseveró el técnico, quien estaba «muy preocupado por el aspecto anímico del chaval», sentenció.