José Antonio Diego|ATENAS
La bielorrusa Yuliya Nesterenko sucedió a la estadounidense Marion
Jones como nueva reina de la velocidad y se convirtió en la primera
campeona olímpica de 100 metros de raza blanca desde los Juegos de
Moscú'80. Nesterenko, de 25 años, alta y poderosa, venció en la
final de Atenas con una marca de 10.93 por delante de la
estadounidense Lauryn Williams (10.96) y de la jamaicana Veronica
Campbell (10.97).
Más de 60.000 espectadores asistieron al prodigio. Desde que la rusa Luidmila Kondratieva aprovechó el boicot occidental a los Juegos de Moscú para hacerse con el título de 100 metros, la velocidad femenina en los Juegos había sido coto exclusivo de la raza negra.
La final estaba más abierta que nunca. No solo por la ausencia de Marion Jones, que no se ganó el puesto en el equipo olímpico en esta prueba (sólo hará aquí longitud), sino porque las semifinales habían barrido, dos horas y media antes, a una cuadrilla de ilustres.