Javier García Ochoa|BAHREIN
Fernando Alonso (Renault) volvió a ganar el Gran Premio de Bahrein,
prueba inaugural del Mundial de este año, gracias a una pasada al
alemán Michael Schumacher (Ferrari) a la salida del segundo
repostaje, cuando ambos se igualaron en la primera curva del
circuito. Michael Schumacher, que ha vuelto por sus fueros, cerró
la puerta al asturiano en la primera curva, pero Alonso no se
amilanó mantuvo la trayectoria de entrada, alargó la salida para
llevar al alemán al exterior y así poder acelerar antes, y se situó
en cabeza de la prueba cuando faltaban 18 de las 57 vueltas para
concluir la carrera.
Alonso comenzó la nueva temporada como terminó la anterior: ganando, y ayer, él y Michael Schumacher, pudieron terminar el duelo que iniciaron el pasado año y que terminó con la temprana retirada del alemán. El duelo sobre la pista de Sakhir duró las 57 vueltas, disputadas a un ritmo vertiginoso. Schumacher partía desde la «pole» y Alonso desde el cuarto puesto, y de nuevo el asturiano volvió a estar impecable en la largada. Superó al británico Jenson Button (Honda), porfió con el Ferrari de Felipe Massa hasta la primera curva, pero hasta dos después no le adelantó, y luego comenzó a seguir a Schumacher como su sombra, como haría el alemán con él. El único momento peligroso para Alonso fue en la séptima vuelta, cuando Felipe Massa perdió el control de su Ferrari al final de la recta y estuvo a punto de llevarse el Renault del campeón del mundo. Pero éste salió airoso de la situación y continuó la persecución de Schumacher. En el primer repostaje Alonso no pudo superar al alemán, en el segundo tenía dudas de hacerlo, pero cuando se incorporó a la pista ambos se emparejaron y del duelo en la curva de final de recta salió airoso el español, que ya tenía prácticamente la carrera en el bolsillo para comenzar de la mejor manera posible el Mundial de éste año.
Igualdad
Esta primera carrera de la temporada ha demostrado la gran igualdad
existente entre cuatro escuderías, Renault, Ferrari,
McLaren-Mercedes y Honda, pero también que sólo tres pilotos
aspiran al título, el vencedor Fernando Alonso, el segundo Michael
Schumacher y el tercero, el finlandés Kimi Raikkonen
(McLaren-Mercedes).
Raikkonen partía desde el último puesto de la formación de salida y empleó una táctica totalmente sorprendente en relación a sus rivales. A pesar de estar autorizados los cambios de neumáticos, se detuvo tan sólo una vez, a mitad de carrera, y terminó tercero a diecinueve segundos del vencedor. Sin los problemas que tuvo el sábado, podía haber luchado por la victoria, sino conseguirla.
Otro piloto destacado en esta primera carrera del mundial fue el debutante alemán Nico Rosberg (Williams-Cosworth), que no comenzó con muy bien pie, ya que en la primera curva se tocó con su compatriota Nick Heidfeld (BMW) y el portugués Tiago Monteiro (Midland), y tuvo que parar al final de la primera vuelta a cambiar el morro del coche.
Desde el último puesto Rosberg, hijo del campeón del mundo de 1982 -el finlandés Keke Rosberg-, remontó hasta la séptima plaza y consiguió sus dos primeros puntos del mundial y entrar en la historia de la Fórmula Uno, al arrebatar a Fernando Alonso uno de los records de juventud que tenía el asturiano, el de autor de la vuelta rápida en carrera. Rosberg, con 20 años, 8 meses y 13 días, ha mejorada la marca que tenía Fernando Alonso desde el Gran Premio de Canadá de 2003, cuando el asturiano, con 21 años, diez meses y 17 días, mejoraba por un solo día el récord de Bruce McLaren.