Lorenzo Martínez|ROMA
Rafael Nadal, número dos del mundo, pasó la dura reválida del duelo mallorquín con Carlos Moyà, en partido entre los dos últimos ganadores del Másters Series de Roma, en una segunda ronda en que cayeron el también hispano Juan Carlos Ferrero y los argentinos Gastón Gaudio (8) y Guillermo Coria (9). Juan Carlos Ferrero, que era el tercer jugador que podía repetir triunfo final en el torneo de Roma (ganó en 2001), cayó ante el francés Paul-Henri Mathieu, por 6-1 y 6-3; Gaudio lo hizo con el belga Xavier Malisse, por 4-6, 6-3 y 6-3; y Coria, finalista en 2005, contra el español Rubén Ramírez Hidalgo, procedente de la previa, por 6-3 y 6-2. La segunda jornada también trajo los triunfos de los cabezas de serie David Nalbandian (4), Andy Roddick (5), Nikolay Davydenko (6) y Radel Stepanek (14). Pero el duelo estrella de la segunda jornada, era el que protagonizaron emanacorí Nadal y el mallorquín Moyà, el más esperado por todos de la primera ronda. Un choque que debería haberse producido más avanzado el torneo pero que el sorteo quiso que fuese lo más pronto posible. Y la cierto es que el partido respondió y trajo momentos de buen tenis y de emoción.
No en vano, tras apabullar Nadal a Moyà en el primer set (6-1), en lo que parecía un partido de corta duración, se pasó incluso a presagiar que Nadal podía dejar en Roma su acosó al récord del argentino Guillermo Vilas (53 partidos consecutivos ganados sobre tierra batida). Y es que Moyà, como sucedió hace pocas semanas en el torneo de Miami, supo cambiarle la táctica, y mostró que conoce mejor que nadie a su amigo Nadal y le castigó sobre el revés. Cambiaron las tornas y se pasó, casi de golpe, al triunfo fácil en el segundo set (6-2) de un dominador Moyà. Nadal parecía tan perdido como en Miami (6-2, 1-6 y 1-6) y el fantasma de la derrota apareció sobre la pista y en las gradas, en donde había gran presencia de aficionados españoles.
Pero Nadal reaccionó de inicio, se aprovechó de un bajón de Moyà que le hizo cometer algunos errores, y empezó a alejar los fantasmas, a tranquilizarse, con un favorable 3-0. No obstante, no lo tuvo fácil, pues reaccionó el mallorquín y, con 2-4, dispuso de una excelente ocasión (15 a 40) para volver a meterse en el partido. Salvó Nadal (incluso con su primer «ace») el peligro y se llevó el set (6-2) y el partido. Su pase a segunda ronda y la prolongación a 48 de su récord de partidos consecutivos ganados sobre arcilla, a cinco de Vilas. Moyà se va con la cabeza alta, habiendo tenido sus opciones, dejando muestras en el segundo set de una recuperación de su notable tenis, y lamentando haber tenido que enfrentarse en primera ronda con su amigo Nadal.